DESCRIPCIÓN El azafrán es una planta herbácea perenne de hojas lineales que están reforzadas por un nervio de color claro. Posee un bulbo escamoso subterráneo de tamaño algo mayor al de una avellana. Su bohordo, que es muy corto, está rematado en una flor (la rosa del azafrán) abierta en forma de embudo, de color violeta y dividida en 6 lóbulos. Dentro del tubo de la flor el estilo se separa en tres partes, cada una ellas termina en una hebra o estigma anaranjado (las briznas del azafrán), las cuales sobresalen por encima de la flor. Florece durante el verano. Su reproducción se efectúa mediante multiplicación de los bulbos hijos, los cuales nacen en la base del bulbo madre. RECOLECCIÓN Las partes útiles para recolectar son los estigmas junto con una parte del estilo, los cuales se extraen de la flor cortada entera. La época de recolección varía según el lugar, aunque suele ser en general entre septiembre y noviembre. Se recomienda hacerlo a primeras horas de la mañana para que el sol no marchite las flores. Una vez recolectadas se ponen inmediatamente a secar a la sombra o en secadero, colocadas sobre esteras, o mejor aún sobre piedras calentadas (puede incluso utilizarse un brasero o fuego suave); el objetivo es que pierdan en un tiempo muy corto (media hora) el agua que contienen, y así conservar todo el color y aroma característicos. La humedad y la luz estropean sobremanera el azafrán, por ello debe ser conservado herméticamente en frascos de cristal y lugar seco. APLICACIONES Y PROPIEDADES El azafrán contiene crocinas, un pigmento carotenoide de la familia de los glucósidos, un jugo amargo también emparentado con los glucósidos, y sustancias diversas. Antiguamente se le atribuyeron innumerables virtudes y propiedades en aplicaciones para el corazón, estimulante, enfermedades contagiosas, viruelas, tos, etc. Ha tenido su máximo auge de utilización y cultivo durante la Edad Media. Hoy en día es muy utilizado en farmacia, especialmente para la obtención de preparados oftalmológicos (tinturas, extractos, colirios y aguas oculares). En medicina popular se utiliza el azafrán como estimulante suave, aperitivo, estomacal y favorecedor de la digestión. Es sedante y antiespasmódica, adecuada contra los dolores de la dentición infantil. En el campo de la alimentación el azafrán goza de gran valor, por ser una excelente especie culinaria para sopas, salsas y ensaladas. Su elevado precio es causa de que sea sustituido por otros productos sucedáneos con mucha frecuencia. Se ha cultivado en Asia menor desde siempre además de como planta medicinal, como especie aromática y colorante; hoy en día es un condimento mundialmente apreciado. Precauciones: El azafrán es tóxico a determinadas dosis. Puede producir graves trastornos nerviosos y renales, y es peligroso en caso de embarazo. Una dosis de 20 gramos ya puede producir intoxicación. REMEDIOS Se puede preparar una infusión digestiva y suavemente aperitiva, utilizando unas briznas de azafrán en una taza de agua hirviendo. Tomar después de las comidas si se desea como digestivo, o antes de comer si se desean efectos aperitivos. El azafrán se puede utilizar como analgésico durante la fase de dentición de los niños. Hacer una infusión con bastantes hebras de azafrán en proporción al agua; dejar enfriar y frot ar las encías en varias sesiones hasta gentileza de .natureduca.com |
como prevenir y tratar la gomosis
-
*tratamiento casero*
mezclar una cucharada de bicarbonato de sodio
una cucharadita de jabón natural
un litro de agua
mesclar bien y polvorizar las...
Hace 1 año